Un cabello fuerte y sano pasa por un buen cuidado diario capilar. Todo es importante en el proceso, desde un cepillo suave que desenrede sin romper el pelo hasta una limpieza profunda del cuero cabelludo o un último aclarado con agua fría para una melena brillante. También hay que tener en cuenta el tipo de cabello para adaptar los productos a las necesidades de cada uno: hidratación, encrespamiento, cabello teñido o anticaída, entre otros.
Una de las bases fundamentales de un cabello sano, fuerte y brillante es la hidratación tanto del cabello como del cuero cabelludo. Cuando el pelo está deshidratado sufre más los efectos del encrespamiento ya que absorbe la humedad por la falta de hidratación y es ahí cuando se produce el terrible efecto frizz. De igual forma, en el cuero cabelludo aparecen las escamas de la piel seca que se muestran sobre el cabello, creando un efecto antiestético.
Entre todos los ingredientes que contribuyen a hidratar el pelo está uno natural e inesperado que hace mucho más que hidratar: el agua de coco. Entre sus múltiples propiedades, este ingrediente repara y fortalece la fibra en profundidad siendo una excelente fuente de vitaminas y minerales necesarios para la salud del cabello y el cuero cabelludo. También aporta brillo, flexibilidad y suavidad gracias a su concentración en vitaminas revitalizantes y mejora la elasticidad de las fibras capilares. Por último, gracias a su ligereza, hidrata y aporta volumen al cabello penetrando en el corazón de la fibra.
La gama hidratante de Franck Provost contiene nada menos que un 97% de ingredientes de origen natural para reparar y nutrir el cabello en profundidad. Un cabello suave, brillante y flexible gracias a sus dos ingredientes principales: el agua de coco y el aceite de chía. Juntos protegen la fibra de las agresiones externas diarias que lo deshidratan como la exposición al sol, los tintes y las mechas o todos los instrumentos de calor de uso diario como el secador, la plancha o el rizador.
La fórmula hidra es perfecta para esos cabellos secos y deshidratados que se vuelven quebradizos y propensos a la caída. Un pelo que pierde poco a poco el volumen y la flexibilidad debido a que la fibra se debilita y se deteriora gradualmente, provocando que sus escamas se levanten y dejen escapar la hidratación.
Además, el aceite de chía actúa nutriendo y acondicionando el cabello a la vez que reduce la piel seca y escamosa del cuero cabelludo al reponer su composición en proteína natural para un cabello fuerte desde la raíz hasta las puntas. Es rico en ácido alfa-linolénico que ayuda a mantener el brillo natural para un cabello sano y lleno de vitalidad, un ácido que también actúa sellando la humedad y la hidratación en el corazón de la fibra para prevenir la deshidratación.
Si tu cabello necesita una dosis extra de hidratación solo necesitas este ingrediente natural para lucir un cabello sano, fuerte y brillante. ¿A qué esperas para incorporarlo a tu rutina?